15 de diciembre de 2016

¿Por qué me gusta correr?

El otro día estaba viendo en la tele Maraton Man un programa en el que un "chalao" corre maratones por el mundo y los muestra de forma divertida y motivadora. Raúl, que así es como se llama el muchacho, suele preguntarle a la gente con la que se va cruzando en sus diferentes aventuras deportivas que porqué corre y, aunque hay diferentes tipos de respuestas, todos coinciden en un aspecto, corren porque les hace sentirse bien (o muy bien). Pues asunto resuelto. Esa es la clave principal por la que algo que es tan duro pueda enganchar tanto, porque mejora notablemente el estado psicológico del que lo practica; el físico creo que también pero no lo tengo tan claro ;-)

'Cuando corremos juntos, mis pies son los suyos. Y mientras él ríe, yo no me canso'. Jose Manuel y Pablo. (Maraton Man).

Yo hace tiempo que también encontré la respuesta a esta cuestión. Probablemente, como pasa con casi todo en la vida, no hay una sola y exclusiva razón por la que se haga algo, pero, entre todas las razones por las que corro, la principal es porque SIEMPRE me encuentro mejor después que antes de haberlo hecho. Y cuando digo mejor, me refiero a más fuerte, lúcida, creativa, positiva, motivada... Es verdad que también siempre me siento más cansada, pero hasta eso lo pongo en la lista de las consecuencias positivas, porque se trata de un "cansancio bueno" que se diferencia del "cansancio malo" en que aporta y enriquece. Por ejemplo, el cansancio por haber pasado una noche desvelado es un "cansancio malo", porque no ha servido para nada; en cambio, el cansancio que sientes después de haber terminado una carrera es un "cansancio bueno", porque has conseguido, entre otras cosas, superar un reto con esfuerzo y subir un peldaño más en la escalera de la autoconfianza, tan necesaria para andar por la vida con cierto grado de bienestar.

Yo hace muy poco que he retomado esto del correr. Entre el embarazo que tuve un poco complicado y todo el periodo posterior de recuperación, lactancia, crianza, etc, estaba más anquilosada que C3PO, por lo que el retorno está resultando un poco duro, pero no importa porque lo mejor de haber el vuelto es poder volver a sentir esa sensación de subidón que te da el sudar la camiseta.



Otro día hablaré de los regalos que te da el hacer deporte. Ayer, sin ir más lejos, me regaló una Luna llena espectacular que me iba acompañando durante toda la fatiga y que seguro no hubiera visto desde el sofá de casa.

Y tú ¿Por qué corres? 

2 comentarios:

  1. Yo, básicamente por tu culpa... Me encanta que hayas retomado las buenas costumbres, súpermámiranarunner ;-)

    ResponderEliminar